La distribución de los recursos del mundo y la ajustada unidad de todos los pueblos, son una misma cosa, porque detrás de todas las guerras modernas existe siempre un problema económico fundamental. Cuando éste se solucione, las guerras cesarán en su mayor parte. En consecuencia, al considerar el mantenimiento de la paz -que las Naciones Unidas en la actualidad tratan de lograr y hacer resaltar- se evidencia inmediatamente que la paz, la seguridad y la estabilidad del mundo se hallan principalmente ligadas al problema económico. Una vez que estemos libres de necesidades, desaparecerá una de las causas principales de la guerra. Cuando la distribución de la riqueza del mundo no es equitativa y existe el problema de que unas minorías lo acaparan todo mientras otros carecen de lo más elemental, es evidente que hay un factor que fomenta dificultades, por lo tanto es necesario hacer algo para evitarlo. / Los problemas de la humanidad. Alice Bailey.